martes, 16 de agosto de 2016

mirARTE

Solo quería mirarla. Quería verla reírse de sí misma con esa manera tan peculiar que tenía de hacerlo. Quería verla llorar de alegría o ver la cara de susto que me ponía cuando el cielo, decidía imitar su interior desatando fuertes tormentas a las que hasta yo, en alguna ocasión, les tenía miedo.
Quería verla dormir y despertar cada mañana, verla hablar con el sueño y pelearse con el insomnio. Quería ver como se emocionaba con un atardecer, y como me decía "mira que maravilla" cuando yo a la única maravilla a la que podía prestar atención era a ella. Quería verla pedir un deseo a una estrella fugaz desde mi balcón, mientras yo me moría por pedírselo a la cara.
Solo quería verla, porque mirarla sabía cualquiera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario